En Gestoría Rincón nuestro equipo de asesores laborales se encargan de gestionar tus actividades sin preocupaciones y hoy os vamos a hablar de un negocio al alza. Ser freelancer.
El contrato freelance es un tipo de contrato muy similar a un contrato mercantil en el que una empresa contrata los servicios de un tercero para hacer un trabajo puntual con una duración determinada. La profesión de freelance no está regulada como la de un asalariado al que le ampara un contrato fundamentado en el Estatuto de los Trabajadores ya que se trata de un empresario individual y tiene su forma propia de rendir cuentas.
Cláusulas y apartados que debe incluir un contrato freelance
No hay una única forma de redactar un contrato freelance. La empresa que quiera contratar este tipo de servicios es la que suele proponer una serie de condiciones y el freelance las acepta o no, así ambas partes estarán protegidas ante los problemas que puedan surgir al desarrollar el proyecto.
- Nombres y datos fiscales de cada una de las partes.
- Descripción del servicio o el tipo de trabajo que se está contratando.
- Tarifa o precio completo del encargo. Es conveniente incluir en el contrato una cláusula de pago por término, interrupción o rechazo.
- Plazos en los que debería estar terminado el encargo e incluir alguna restricción en caso de incumplimiento del tiempo de ejecución.
- Derechos de autor. En algunos casos será necesario introducir en el contrato freelance una cláusula de derechos de autor. Será preciso cuando se realicen trabajos creativos ya que podrían estar sujetas a derechos derivados de la Ley de Propiedad Intelectual.
- Confidencialidad por ambas partes.
Es muy recomendable que tanto la empresa como el freelance se asesoren profesionalmente sobre la condición que van a firmar. Si sigues teniendo dudas con respecto a este tipo de contrato, puedes acudir a las oficinas de Gestoría Rincón y nuestros expertos te acompañaran en todo el proceso.